Hoy es el día, son las 6:00 de la mañana del 11 de agosto de 2007, estoy esperando a Manolo, viene desde la Urbanización San Fernando donde reside a unos 8 kilómetros del casco urbano de Oliva, donde resido yo. La verdad, ya lo tengo todo preparado, así qué...
En principio tenemos todo el día para llegar a Llançà en Girona, lo que prácticamente nos deja al lado mismo de Francia y del Mediterráneo.
Hey! ya lo tengo aquí, cargamos y salimos disparados hacia Almoines, donde recogemos a Pep sobre un cuarto de hora después.
Según el 'planning' hemos de llevar las bicis y los equipajes a Casa Habitaciones Castelló y después regresar al aeropuerto de Girona con el fin de devolver el vehículo de Avis. Allí nos esperan unos muy buenos amigos, Manel y Fina residentes en Arenys de Munt, los cuales se han prestado a llevarnos a Llançà en cuanto dejemos el coche.
Unos 600 kilómetros nos esperan por delante, no superamos en ningún momento las velocidades máximas permitidas, pero nos atascamos un par de veces en colas interminables, mejor ni recordarlas :-)).
Nos detenemos para el almuerzo, hey caray!! estos chicos no se quieren perder ni una, yo con un café con leche voy sobrado, un recuerdo para alguien que se irá a CHINA!!!. Hombre faltaría plus!
Seguimos la ruta, por supuesto pararíamos a comer; aquí ya no me negué a llenar el depósito. Por la tarde me pongo en contacto con mi amigo Manel, nos están esperando ya, han salido por la mañana y han aprovechado para hacer turismo y ver lugares que ya hacía algún tiempo que no visitaban. Así que en cuanto llegamos a Llançà y encontramos el alojamiento dejamos los trastos y las bicis.
Un par de instántaneas mientras la jefa nos acompaña a nuestra habitación y charlando cuando salíamos para dirigirnos al aeropuerto.
Dejamos el coche aparcado en la zona AVIS del aeropuerto de Girona y nos dirigimos dentro de la terminal, al mostrador de AVIS. Allí devolvemos llaves y renellamos algunos papeles... bueno, el tío Manuel, que va a su nombre. jejejeje
Finalmente pude abrazar a Manel y Fina. Una gran parte finalizada. Ahora queridos amigos, estamos en vuestras manos! Nos gusta mucho conocer sitios, así que a verlos.
Vaya que sitios. El Manel nos lleva carretera arriba, en busca del Monestir de Sant Pere, de camino vemos El Port de la Selva, que disfrute viendo ambos.
Acabamos recogiendo una bolsita de arena para depositarla en el Atlántico, luego un buen cenorrio y vistas nocturnas antes de irnos a dormir y pensar en lo que se nos avecina.