Aún cuando el cuenta-kilómetros sólo ha contabilizado 54 kilómetros, hemos hecho más. Hemos estado recorriendo un sendero en subida a pié casi completamente, alguna
pequeña excepción unos metros y yastá. Justo en este sendero nos hemos encontrado con un par de ciclistas residentes en Barcelona, un asturiano y un francés, que hacían la misma
ruta y que en este tramo al confundirse se habían metido dentro de la vegetación, siendo problemática la salida hacia arriba, así que les prestamos una pequeña ayuda y continuamos
todos hacia adelante. Coincidiremos durante el trayecto de la etapa en varias ocasiones.
Hemos pasado por pequeños pueblos como SAS, donde hemos descansado unos momentos y aprovechado para tomar unas fotos. Luego siguiendo la pista llena de piedras sueltas,
horrible, que se ha hecho superpesada y donde ibamos ojo avizor para no patinar y caernos al suelo. La llegada a Pont de Suert sobre las 16 horas. El Juansa en la
última bajada pronunciada ha roto el freno trasero (ya llevaba el trasero mal) y Manolo, haciendo gala de su arte, lo ha apañado para poder seguir. (Y es que terminó en Hondarribia sin frenos).
El Hotel Mestre ha estado magnífico. Al menos después de lo Espui esto nos ha parecido un verdadero paraiso, con un trato excepcional por sus propietarios. Especialmente desde la cocina ;-) La habitación es un tipo de buhardilla, aprovechamos y hacemos colada. Además aprovechamos que Pont de Suert tiene cerca una gasolinera con máquinaria de lavado y les damos un repaso a las bicis, ¡ostras! Irreconocibles, parecen nuevas.